Paseando por las proximidades de la Catedral de Sevilla llegamos al barrio de Santa Cruz, uno de los rincones con encanto que más me han gustado de la capital andaluza.
Callejones de Santa Cruz
Perderse en las callejuelas de este barrio es inevitable, en nuestro paseo nos cruzamos varias veces con los mismos grupos de turistas con un mapa en la mano intentando ubicarse. Pero aunque os perdáis durante unos minutos, es parte del encanto de este barrio. Abundan las cervecerías entre las casas de paredes blancas y balcones llenos de flores, y en algunas intersecciones os encontraréis en plazas preciosas como la de Doña Elvira, con una fuente en el centro yrodeada de bares con terrazas perfectas para cenar en una noche de verano.
Plaza Doña Elvira
Cerca de esta plaza se encuentra la de los Venerables donde se dice que nació Don Juan Tenorio.
Una de las callejuelas más famosas de este barrio es el «Callejón del agua» que bordea la muralla y jardines de los Reales Alcázares. Paseando por el barrio se puede ver desde algunos rincones la torre de la Giralda.
Giralda